Consecuentemente a la gran crisis de confianza mundial en la aviación que siguió Septiembre del 2001, la feria del 2002 podía haber sido una « FIDAE pobre », pero a pesar de muchas ausencias de importancia, el evento que tuvo lugar del 1° al 7 de abril no careció de novedades, ni de interés.

Los protagonistas del programa F2000 de las ediciones pasadas fueron los lógicos ausentes, ya que se había declarado como ganador el F-16C. El anfitrión FACH tuvo por lo tanto que asumir el grueso de la exhibición militar. Esta vez, el “Cóndor” AEW permaneció en la losa durante tres días, sustituido para los días de público por el “Águila”. No lejos se encontraban el Boeing 737-500 presidencial, el Gulfstream IV VIP, un DHC-6-300 equipado con un “glass cockpit”, y uno de los nuevos Cessna CJ-1, adaptados al doble papel de avión de entrenamiento y avión de evacuación sanitaria, y también uno de los clásicos C-130H de la institución, pero pintado de un gris claro uniforme de alto brillo. Para la mayoría de los aficionados, la gran novedad de la FACH fue el F-5E “Tigre III” del Grupo 7, por cierto ya conocido en sí, pero en el cual nuevas antenas fueron identificadas como relacionadas con el misil de alcance medio israelí llamado “Derby”, competidor directo del misil AMRAAM negado por los Estados Unidos. La Fuerza Aérea y la Aviación Naval presentaban ambas un Bell 412, hasta ahora nunca vistos en público, el primero luciendo una torreta giroestabilizada multi-sensores, producto de una colaboración entre Enaer e IAI .

ENAER, festejando el nuevo record mundial establecido en el 2000 por el “Turbo Pillán” (ex T-35TX, ex-Aucán) con 388,5 km/h en línea recta sobre 15 km, anunció su intención de proponer al mercado del entrenamiento mundial un “Tucano más barato” basado en el aparato rojo y blanco. Al mismo tiempo, propuso un “glass cockpit” opcional a sus clientes de Pillán. Otro producto nacional estuvo de estrella, ya que el “Eaglet” (ex-Ñamcú) pudo anunciar que había logrado alcanzar la certificación JAR europea.

La parte internacional era finalmente la menos importante, con un par de F-16C norteamericanos representando la aviación militar norteamericana, la británica siendo personificada por dos “Tornado” F3 acompañados por su VC-10 de reabastecimiento. CASA trajo de España su C-295, la Fuerza Aérea Uruguaya un Cessna A-37B, recién salido de revisión por ENAER, mientras que el “Tucano ALX” aparecía de nuevo, luciendo en la nariz un espléndido hocico de tiburón. La real novedad la constituyó el helicóptero pesado Mil Mi-17V5 traído por la empresa ucraniana Kazan, que sorprendió las autoridades institucionales al operar a plena carga desde las estaciones de ski más altas de la cordillera de los Andes. La compañía Copters trajo un “Ecureuil”, igual de rojo como sus colegas de los años anteriores, anunciando de la mejor manera la creación en Santiago de una decimotercera subsidiaria de Eurocopter, encargada de una región que cubriría Chile, Perú, Bolivia, Argentina y Uruguay : para demostrar su éxito, la firma exponía un AS350 recientemente vendido a la Policía de Investigaciones. Su eterno rival Bell estuvo también muy presente, entre otros modelos con el Bell 407, mientras que Agusta-Westland expuso un A109 Power, propuesto a Carabineros.

De acuerdo con la tendencia iniciada durante las tres ediciones previas, la aviación civil tomó aún más importancia en esta feria, con la llegada espectacular del Airbus A-340-600, el avión de pasajeros más largo del mundo, acompañado por su hermano menor, el ACJ (Airbus Corporate Jet) competidor del BBJ de Boeing, y que venía de festejar su primer éxito: la venta de un aparato a la presidencia venezolana. Para compensar el vacío dejado por el BBJ, un B-737 de Varig y un B737 y un 767-300 Cargo de LAN Chile vinieron a levantar la bandera Boeing. A lo largo de la losa, el público pudo conocer de más cerca el Embraer “Legacy” de transporte ejecutivo, el Cessna “Citation Bravo” adquirido por Carabineros de Chile, un Cessna “Grand Caravan” civil bautizado “Sure Thing”, el Gulfstream G200 , nacido en Israel como “Galaxy”, el Learjet 60 y el Bombardier “Challenger 604”, y el magnifico “Falcon 900EX” traído desde Argentina por su dueño y piloto. Los Embraer EMB-170 y C-27J, anunciados, no llegaron. Para confirmar la presencia civil, la IATA tenía por segunda vez una conferencia internacional, llamada “Wings of Change” (Alas del Cambio).

En cuanto al espectáculo, exceptuando la habitual performance de los “Halcones”, y lamentando la ausencia de último minuto de la escuadrilla argentina “Cruz del Sur” con sus Sukhoi Su-29AR, la “Fumaça” estrenaba nuevos y vistosos colores basados en la bandera brasileña, mientras que un viejo P-2V “Neptune” civil convertido por Heliworks en avión contra-incendio demostró a diario sus capacidades al apagar los fuegos prendidos al lado de la pista de aterrizaje. Momento clave del show de 1998, el “hombre-cohete” repitió en 2002 su corta pero impresionante performance.

Finalmente, la edición 2002 de FIDAE fue el perfecto punto de lanzamiento para otro programa militar con los mismos competidores que el F2000: el F-X brasileño, para el cual Embraer y Dassault anunciaron su alianza en el programa M2000BR.

Recordada versión por los grandes que nos visitaron, recuerdo al piloto del Jas 39 cuando aterrizó usando la nada de pista y luego queda mirando al público moviendo los alerones delanteros. (Rafael Shinya).

Fuente: FIDAE SKIES (Cielos de Fidae 2004)

FIDAE 2002, Los Cerrillos